
Un nuevo revés , esta vez ambiental, se suma a la ya aproblemada implementación del desmejorado plan
capitalino de transporte público.
Mientras algunos sindicatos anuncian nuevas paralizaciones del servicio, mientras las recaudaciones de los operadores han disminuido cerca de un 50% por la evasión tarifaria, un nuevo dolor de cabeza se suma el gobierno central.
Esta vez fueron las malas condiciones del aire, que llevaron a la Intendencia Metropolitana a decretar alerta ambiental. La medida implica que miles de autos sin sello verde, más los catalíticos adicionales, no podrán circular por la ciudad.
La deducción es simple y el problema aumenta. Esto porque quienes deban dejar sus vehículos en casa, deberán sumarse a los apretados y mal humorados pasajeros habituales del ex plan estrella del gobierno...ojalá que los dineros aprobados por el congreso se vean en las calles, y no sólo en la tele.